Todas las vísceras poseen dos tipos de movimiento que son importantes para su función:
- Uno de estos movimientos es el que ofrece el diafragma a través de los ligamentos y estructuras de sostén visceral a la hora de realizar la inspiración- espìración.
- El otro es el movimiento generado por la propia víscera , llamado motilidad.
El déficit de cualquiera de estos dos movimientos podrá generar alteraciones funcionales no patológicas en cualquiera de las vísceras disminuyendo si capacidad de funcionamiento.
Son muchos los casos de pacientes que llegan a consulta con una lumbalgia donde todas lasa pruebas radiológicas son negativas y tiene una columna totalmente sana, sin embargo la molestia persiste desde hace bastante tiempo e incluso años , detectando finalmente una disfunción visceral.
Otro de los problemas frecuentes es el caso de el tratamiento de los problemas cervicales. Es muy corriente tratar pacientes con problemas en cervicales que han sido tratados de este problema y sin embargo su molestia persiste debido a que el tratamiento no ha sido adecuado. En muchas ocasiones estos problemas también se deben a fijaciones viscerales.
Una fijación visceral no tratada puede llegar a producir un bloqueo vertebral que a s u vez mantiene la lesión visceral . De tal modo que puede ser la responsable de mantener una lesión en la columna vertebral por fijación , y esta no corregirse hasta tratar la lesión visceral. De igual forma , una fijación visceral puede producir una lesión en cervicales , creando una tensión en cadena hasta llegar a la musculatura cervical.
Es muy normal relacionar lesiones de hombro derecho con una fijación baja de hígado o una molestia de hombro izquierdo con fijaciones de estómago . Lesiones en rodilla de mujeres por fijaciones de vejiga o útero que comprimen al nervio correspondiente (genitocrural) que va a tener inervación en la cara interna de la rodilla.
Este tipo de terapia está muy indicada después de las operaciones, como terapia adicional complementaria . Sobre todo por problemas de cicatrizaciones post-quirúrgicas por el riesgo a adherencias de la propia cicatriz.